miércoles, 17 de octubre de 2007

Tiempo y espacio

PARSIFAL: -Solo me trasladé un poco y, sin embargo,
parezco haberme alejado mucho.
GURNEMANZ: -Ya ves, hijo mío, aquí el tiempo se convierte
en espacio.
“Parsifal”, ópera de Wagner.


La linealidad es comunmente referida como una cualidad inherente a la era moderna. En efecto; la aparición de la perspectiva lineal en pintura, el desarrollo del pensamiento racional, la medición del tiempo y el principio del norte, la fe en el progreso y la vida futura, la búsqueda de la utopía, etc, son características fundamentales del período historico que denominamos Modernidad. Pero una de las características esenciales de lo moderno atenta contra esa linealidad. En un escrito ya célebre Charles Baudelaire va a definir a lo moderno como:”lo fugaz, lo transitorio, lo contingente”;
esta percepción vertiginosa del tiempo es también la experiencia moderna por antonomasia, un paso acelerado hacia el futuro, una linealidad y una unidad paradójicas “la unidad de la desunión: nos arroja a todos en una vorágine de perpétua desintegración y renovación, de lucha y contradicción, de ambigüedad y angustia. Ser modernos es formar parte de un universo en el que, como dijo Marx, todo lo sólido se desvanece en el aire, todo lo sagrado se ve profanado…”


Toda época tiene su velocidad, la expansión de los medios de comunicación genera saltos cualitativos que alteran radicalmente estas velocidades. En el mundo de Parsifal la aparición del ferrocarril acelera los desplazamientos, plantea nuevas percepciones, el paisaje es recorrido por los ojos, lejos queda ya el ojo inmovil y ubicuo del artista del Renacimiento, surgen los panoramas, espacios para recorrer en el tiempo, en especial el panorama americano, que simula precisamente un viaje en tren. En este contexto la fotografía va a hacer su aporte, el daguerrotipo congela el tiempo, “espejo con memoria” es la metáfora utilizada para hablar de las imágenes que brillan desde el metal…

Y hasta aquí llegué, pero quería publicarlo.

Me faltaría hablar de Philip K. Dick, de la esquizofrenia como una experiencia temporal, de Von Helmholtz y los paradigmas de la visión ocular humana del siglo XIX, de la panorámica como una ruptura con el perspectivismo cartesiano, del espacio-tiempo de Minkowski (que nunca llegaré a comprender) y de la fotografía que, como en la experiencia de Parsifal, convierte al tiempo en espacio.

Necesitaría más tiempo…


No hay comentarios: